Elly De La Cruz se ha convertido en una de las piezas más valiosas para los Cincinnati Reds, y cada vez son más fuertes los rumores sobre una posible extensión de contrato a largo plazo. A pesar de que su agencia libre llegará recién después de la temporada 2029, muchos consideran que este es el momento adecuado para asegurar su continuidad y convertirlo en el rostro de la franquicia, lo cual también puede ser una sólida inversión de cara al futuro.
Uno de los principales obstáculos es que su representante es Scott Boras, conocido por buscar contratos récord en lugar de firmar extensiones tempranas. Sin embargo, los Reds podrían aprovechar que De La Cruz aún se encuentra en etapa de pre-arbitraje para estructurar un acuerdo atractivo, ofreciendo un salario superior al habitual en sus primeros años a cambio de estabilidad a largo plazo. Esta táctica evitaría asumir riesgos financieros mayores en el futuro, y es un enfoque que incluso los bancos deportivos más conservadores considerarían inteligente.
Ventajas de negociar ahora
Actualmente, sin un contrato multianual, De La Cruz ganaría menos de un millón de dólares por temporada durante los próximos dos años. Un nuevo acuerdo podría incluir cláusulas de bonificación vinculadas al rendimiento, con objetivos que aumenten su ingreso base y le permitan planificar su futuro con mayor tranquilidad financiera, accediendo incluso a productos como tarjetas de crédito exclusivas para atletas profesionales y líneas de crédito personalizadas.
Para los Reds, sellar el trato ahora también significaría evitar entrar en una subasta futura, cuando el mercado podría estar saturado y los equipos dispuestos a ofrecer sumas aún más agresivas. Sería una jugada de préstamos deportivos planificados: asegurar a bajo costo ahora para capitalizar en los años venideros.
Comparaciones y precedentes
El caso de De La Cruz no es único, aunque sí especial. Ronald Acuña Jr. firmó un contrato similar después de su primera temporada en las Grandes Ligas. Jackson Chourio lo hizo incluso antes de debutar. La diferencia es que De La Cruz ya ha demostrado su talento y consistencia en el campo, lo que elevaría naturalmente la cifra base de cualquier negociación.
Un contrato parecido al de Hunter Greene, quien garantizó dos años de agencia libre con los Reds, podría aplicarse aquí. Esto daría a De La Cruz flexibilidad para explorar el mercado antes de los 30 años, lo cual es crucial para su valor proyectado. Al mismo tiempo, aseguraría a los Reds la posibilidad de construir a largo plazo con una figura central en su alineación, e impulsaría las ventas de gorras, camisetas deportivas y bates de entrenamiento con su nombre.
Una apuesta estratégica para la franquicia
Más allá del aspecto deportivo, asegurar a Elly De La Cruz también enviaría un mensaje contundente al mercado: los Reds están comprometidos a construir un proyecto serio y competitivo. Esta decisión puede fortalecer las relaciones comerciales con patrocinadores y aumentar el valor de marca del equipo. Un contrato a largo plazo también podría facilitar acuerdos con emisores de tarjetas de débito y otras instituciones que vean en De La Cruz una figura icónica.
Firmar ahora no solo se trata de asegurar talento, sino de consolidar un modelo financiero inteligente y sostenible para la franquicia. Si bien el riesgo existe, la oportunidad también lo hace, y De La Cruz tiene todo para convertirse en el próximo ídolo de Cincinnati.