La influencer Alexandra MVP se vio envuelta en un contratiempo que generó burlas y comentarios en redes sociales tras no poder ingresar a los Premios Juventud 2024. En su cuenta de Instagram, Alexandra respondió a estas burlas diciendo: “Están gozando mucho, mañana hablamos que estoy de Party”.
El incidente ocurrió en el Coliseo José Miguel Agrelot, donde se celebró la ceremonia. Alexandra explicó que su equipo de glamur no pudo terminar a tiempo su preparación para la alfombra roja, lo que resultó en su llegada después de que el desfile de celebridades había concluido.
En un comunicado posterior, Alexandra aclaró que Univisión no tuvo la culpa y expresó su respeto y agradecimiento hacia el equipo organizador y sus directrices. A pesar del inconveniente, se mostró agradecida por el apoyo y la oportunidad de asistir al evento.
La influencer también agradeció al promotor de artistas Vladimir Gómez, quien hizo un esfuerzo notable para que Alexandra pudiera ingresar al evento. Un video en redes sociales muestra a Gómez intentando abogar por su entrada en el momento crítico.
El contratiempo y las reacciones no pasaron desapercibidos, especialmente entre figuras públicas. Dalissa Alegría, la actual pareja del ex esposo de Alexandra, Mozart La Para, publicó un video en sus historias de Instagram con emojis de risas, lo que muchos interpretaron como una burla hacia Alexandra.
La situación con Dalissa Alegría agregó un elemento de tensión y drama adicional al ya complicado escenario para Alexandra. Sus seguidores se dividieron en opiniones sobre la aparente burla de Dalissa, intensificando la polémica en redes.
Alexandra dando declaraciones
A pesar del revuelo, Alexandra MVP se mantuvo firme y positiva, prometiendo abordar el tema con más detalle después de su fiesta. Su respuesta y actitud frente a las críticas reflejan su resiliencia y habilidad para manejar situaciones adversas.
Finalmente, este incidente subraya las dificultades y presiones que enfrentan las figuras públicas en eventos importantes, donde cualquier desliz puede convertirse en un tema de discusión y burla en el ámbito digital.